Lic.Dariana González
Hablando de disciplina Positiva
Llantos, gritos, pataletas, castigos, desafíos y más pueden convertirse en el ambiente familiar diario cuando no estamos claros con el plan y es solo eso tener un plan, pero pocas veces nos detenemos a diseñarlo, a preparar las estrategias, a evaluar nuestro estilo de crianza y determinar si lo hemos elegido o solo son costumbres que heredamos de la forma en la que nos criaron nuestros padres porque si bien es cierto que nuestra experiencia como hijos nos define hoy como padres, también es necesario recordar que cada día podemos tomar nuevas decisiones y emprender un nuevo camino en la crianza de nuestros hijos.
A esto llamamos educación consciente, cuando decidimos por nosotros mismos como queremos educar y planificamos nuestras respuestas ante estos estadios críticos de la infancia, logrando ejercer de forma consciente un acompañamiento adecuado para cubrir las necesidades de nuestros hijos.
La disciplina Positiva marca pautas indispensables para entender las conductas de nuestros hijos, aquellas que marcamos como inadecuadas; nos enseña ademas como atenderlas a través de la generosidad y el respeto mutuo. Se trata de resaltar lo positivo para aminorar lo negativo, pero el trabajo mas importante está en nosotros y es personal ya que educamos con el ejemplo, es observarnos a nosotros mismos y tratar de ser el mejor molde para ellos ya que lo que ven en nosotros posiblemente lo imitarán.